Aunque en muchos períodos de la historia han ocurrido movimientos migratorios, no es aventurado asegurar que en la actualidad emigrar impacta de manera significativa la realidad global.

Actualmente, el planeta entero experimenta importantes movimientos en todos sus hemisferios. Y así como desde oriente aproximadamente cincuenta millones de personas de origen musulmán han emigrado a Europa y América, y a la fecha unos 3,5 millones de ucranianos han abandonado su país a causa de la guerra, desde Latinoamérica se estima que cerca de treinta millones de personas han abandonado sus países de origen; de ellos, unos 7,5 millones son venezolanos.

Las alarmantes cifras son aún más dramáticas cuando se analizan desde la perspectiva de estratos sociales y condiciones de la migración. Más de un 80% son personas de muy bajos recursos que escapan de la miseria en busca de refugio, acogida y abrigo; muchas de estas personas se desplazan a pie durante incontables días hasta llegar a algún país en la región que los reciba o donde logren ingresar ilegalmente. Huyen de la pobreza hacia la incertidumbre, movidos por la necesidad y la esperanza. 

El resto de esta estadística está compuesto por una amplia variedad de personas de las más diversas condiciones, profesiones y oficios —desde obreros calificados, comerciantes, emprendedores, técnicos y profesionales de todas las áreas— quienes en su mayoría buscan las vías legales para hacer una nueva vida en su país de destino.

Ciertamente, emigrar es una de las decisiones más difíciles y nadie lo hace para fracasar. Por eso, la mejor opción es hacerlo con un plan lo mejor estructurado posible.

A la hora de emigrar: Prever todo, paso a paso

Una vez que se está decidido a emigrar, hay tres factores fundamentales a considerar: tener la documentación legal que permita vivir y trabajar en el país de destino; la certeza de contar con un trabajo, negocio o empleo que garantice el futuro próspero que se aspira, y una vivienda confortable.

Hay algunos latinoamericanos que cuentan con doble nacionalidad, lo que facilita el tema legal. Sin embargo, en la mayoría de casos se requiere cumplir con toda una serie de documentos y requisitos para solicitar —no siempre con éxito— un estatus de asilado o residente. Y sin esto, las opciones de trabajo se reducen a un riesgoso mínimo. Y del mismo modo, para tener acceso a una vivienda se necesita un estatus legal.

Por esta razón, quienes mejores probabilidades tienen de que su proceso de migración les proporcione la realización de sus sueños, son aquellos que lo hacen con base en un plan, definido paso a paso, abarcando esos tres aspectos. 

Emigrar con negocio y hogar: Una oportunidad integral

Con este grupo de personas en mente —aquellas que desean emigrar legalmente y con las mejores garantías— la empresa Replus se concibió Negocio y Hogar. 

Conscientes de que no es un programa para todos los perfiles de migrantes, Negocio y Hogar se estructuró de manera que cubra los tres aspectos fundamentales: legal, laboral y habitacional.

Y aunque sí deben cumplirse ciertos requisitos, como proporcionar toda la documentación que se solicite para la tramitación migratoria y acreditación de solvencia económica; realizar una inversión moderada y cumplir con un perfil personal y ético afín con los principios y valores de Replus, Negocio y Hogar está abierto a todas aquellas personas que deseen realizar su sueño de emigrar a España con un plan seguro y que le ofrece todas las garantías.

De este modo, quienes apliquen y ejecuten el sencillo proceso, podrán ver realizado su deseo de iniciar una nueva y próspera vida en España, con la tranquilidad de llegar desde el primer día, contando con un hogar donde vivir y un negocio con todo el respaldo de una empresa reconocida.

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